30.3.12



Tanto de echarme abajo, de pisotearlo todo y de estar al borde de darme por vencida, solté todo aquello físico que podría matarme de una vez. Mi cuerpo juega conmigo y al igual que mi cabeza tiene ganas de decir basta.



23.3.12

15.3.12



La angustia se apaga, de a poco, de forma gradual, a paso excesivamente lento, disminuye. A veces creo que se toma un calmante de mi, que se aburre y decide que quizás dejarme tranquila por un rato es la mejor opción. 
Entonces descubro que es sólo un estado de mi propia crudeza, que se pasa como se pasan todas esas cosas interiores y que así como siempre he dicho cuando hay cosas que no hacen bien: simplemente hay que abandonarlas, cortarlas de raíz y correr, huir lejos, no volver.

Suele llamarse decisión...



12.3.12

GO back...



Es que esto es una espiral que me absorbe, me quiebra y me deja sin voluntad. Estoy sin aire, en el vacío extremo.
Ya no existen las cosas que solían estar y tampoco quiero hacer nada por recuperarlas, porque quiero estar sola, encerrarme y ser atacada, que se me pase el dolor como siempre se pasa... sólo, así como si nada. 
Volver a la calma... a la fatídica calma: sonreír cínica, inventar buenos estados y hacer que todo tenga el sentido exacto; simular que la vida va de la manera que he planeado, jugar a que le gano a la realidad, creerles a todos... vivir de alguna manera.